Jeep Grand Cherokee SRT8

¿Un SUV puede funcionar como un deportivo? La respuesta la ha dado Jeep en forma de modelo: el Grand Cherokee SRT8. Se trata de un vehículo que adopta una imagen radical que anticipa lo que esconde su capó, un V8 de 6,4 litros capaz de rendir una potencia de 465 CV. El propulsor va acoplado a un cambio automático con levas en el volante. Además, el todocamino tiene cinco modos de conducción: Automático, deportivo, remolque, circuito y nieve.

Gracias a su bloque de 8 cilindros en `V´, el SRT8 acelera hasta las 60 millas por hora (97 km/h) en unos increíbles 4,8 segundos. Por si esta cifra no fuese suficiente para el conductor, la marca americana ha hecho una puesta a punto al chasis, con lo que la su rigidez torsional se ha incrementado un 146%. ¿Se le resistirá alguna curva?

Todo `deportivo´ que se precie, debe parecerlo y así ha ocurrido con el Jeep Grand Cherokee SRT8, que es `un lobo con piel de lobo´ gracias a las llantas de 20 pulgadas con neumáticos Pirelli PZero 295/45ZR20, los frenos Brembo con pinzas en rojo de seis pistones, delante, y de cuatro, detrás, los parachoques, el delantero y el capó con tomas de aire adicionales para refrigerar el motor, y las salidas de escape de 100 mm de diámetro. Además, su carrocería está 25 mm más baja, con lo que las escasas salidas campestres que podría hacer el SUV se ven reducidas a 0.

El Jeep Grand Cherokee SRT8 ha sido la sorpresa de la marca americana en el Salón del Automóvil de Nueva York.

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