Arrancamos con el resurgir de un nombre tradicional en la firma nipona Honda; cuando hablamos de Type R solo se nos ocurren altas prestaciones a un precio contenido para los bolsillos de muchas personas alrededor del mundo. La tradición hace su trabajo y su fidelidad a la tracción delantera (con la excepción del NSX Type R) se vuelve a plasmar en un deportivo que definitivamente se sale del esquema lo suficiente como para dejar atrás a sus antepasados e imponer nuevas reglas de juego. No está demás recordar que las comparaciones son odiosas, aunque necesarias, y este Honda Civic Type R 2015 con ‘aires mediáticos’ tiene cifras para medirlas.
1. A la altura del ¡¿Nissan 370Z Nismo o el Subaru WRX STI?!
No es ninguna broma; si ya era de esperar que pueda ir a la par con coches de su segmento (compactos de tracción delantera) como el Volkswagen Golf GTI (prueba), el Seat Leon Cupra (prueba) o el Renault Mégane RS 275 Trophy-R, la sorpresa está en que da para más. Al reemplazar su mecánica atmosférica por una sobrealimentada, el resultado ha sido tan fascinante como desafiante. 310 caballos de fuerza a las ruedas delanteras suena a peligro aventura, y de las prestaciones, ni se diga. Una breve tabla comparativa con estas dos plataformas niponas de altos vuelos te dará una idea.
2. Superior a todos los Type R existentes
Al ser el primero que emplea una mecánica alimentada por turbocompresor, la potencia, valga una redundancia, 310 CV es la mayor vista en los Type R de Honda, lo que representa incluso un sacrilegio desafío al mítico Honda NSX-R de los años 90 (que montaba un V6 DOHC de 3.2 litros), y por obvias razones, deja atrás al extinto Integra y generaciones previas del Civic o el Accord (que en su tiempo también se vistió de Type R).
3. Purista a más no poder
No se puede negar que los atmosféricos van extinguiéndose y Honda también se rindió ante el auge de la inducción forzada, pero su identidad se mantiene intacta con su transmisión manual -no se ofrece con transmisión automática- y toda la potencia dirigida al tren delantero, como en casi todos los Type R fabricados.
4. Tan joven y ya en las carreras
Cuando todavía no era oficial, el Campeonato Británico de Turismos refinó dos unidades dispuestas del equipo Honda-Yuasa BTCC llevando la potencia a 350 CV. Su primera victoria fue gracias a Gordon Sheeden, que dejó atrás, o más bien al lado y a corta distancia, al tricampeón de dicha disciplina, Andy Priaulx, a 0,040 segundos en la segunda fecha disputada en Brands Hatch
5. Más que un nuevo Type-R, un genuino resurgir
El Civic Type R cuenta con un totalmente renovado equipamiento respecto a sus predecesores; llantas de 19 pulgadas y neumáticos específicos para el «hothatch» de 235/35 se acompañan con frenos de discos perforados de 350 milímetros firmados por Brembo; cuatro niveles de ajuste para la suspensión y una barra estabilizadora en la zaga que aumenta la rigidez del tren trasero en 180% (sí, ciento ochenta) cooperan para estabilizar a un furioso samurai que puede arrasar todo a su paso con solo pulsar el botón +R en su interior.